viernes, 11 de julio de 2014

Islamofobia, motor del sionismo

Algo que veo muy común entre las personas que defienden las políticas militares de Israel (también llamadas sionistas) es un desconocimiento enorme y lleno de prejuicios respecto a los países de mayoría musulmana. Suelen homogeneizar todos estos países a la baja, llegando a decir grandes barbaridades como que todos ellos lapidan a mujeres. Y eso cuando no se cometen errores bestiales como mezclar árabes, musulmanes y hasta islamistas como si fueran todos lo mismo, o como si dentro de estos países no existieran varias ramas del Islam o incluso varias religiones. Suele haber también un enorme desconocimiento del pasado colonial y neocolonial de estos países y las causas de la radicalización del Islam entre algunos sectores.

Su ignorancia y sus prejuicios suelen ser consecuencia de su islamofobia, sin duda aprendida después de años de contaminación mediática donde un muerto occidental cuenta para una portada mientras que decenas de muertos árabes apenas dan para un artículo secundario. Aprendida mediante una educación generalmente nacionalista y etnocéntrica que oculta las responsabilidades históricas de los estados europeos durante el colonialismo y en la actualidad. Esta islamofobia llega en algunos casos hasta el punto de justificar el bombardeo de zonas habitadas por civiles como es el caso de Gaza, pero también zonas de Pakistán, Yemen o Somalia por parte del ejército norteamericano. Su islamofobia aprendida ha llegado a deshumanizar a cientos de millones de personas por el mero hecho de ser musulmanas.

Finalmente, como es de esperar, también veo que son personas profundamente etnocéntricas que creen que el modelo de "democracia" occidental es el único aceptable hasta el paradójico extremo de llegar a justificar guerras y violencia a cualquier pueblo que no siga este modelo (aunque lo sigan). Tienen muy incrustada una visión de castigo y competición entre los pueblos del mundo, de un mundo basado en la lucha y el miedo a todo lo que no sea como su construcción identitaria de 'Occidente'.

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